ALFOMBRAS DE FLORES AL AMANECER
Al salir el sol, en los paseos matinales las alfombras naturales y coloridas que los árboles nos regalan son disímiles y hermosas.
En la cotidianidad, sin prisas, disfrutar los regalos simples nos acercan a la divinidad. Sintiéndonos agradecidos por tener un nuevo día para conectarnos con la naturaleza, es como danzamos en armonía con la belleza de la existencia.
En la cotidianidad hay mucho encanto!